¿Alguna vez has dejado de usar tu vehículo eléctrico preocupado por no poder llegar a tu destino?, ¿buscas continuamente puntos de recarga a lo largo de tu itinerario?, o ¿no puedes dejar de mirar el marcador de la batería?
La ansiedad generada por el miedo a acabar en la cuneta por falta de energía es una de las principales preocupaciones de los conductores de los coches eléctricos.
Según una encuesta realizada por la Asociación de Electrónica de Consumo de Estados Unidos, el 71% de los americanos tienen miedo a quedarse sin batería y la autonomía de vehículos es percibida como una de las grandes desventajas (entre otras muchas) de estos modelos.
Sí, la range anxiety es real . «La evolución de las nuevas tecnologías ha influido en diferentes áreas del conocimiento. La psicología también ha visto cómo el uso de la realidad virtual, la realidad aumentada o la terapia psicológica online, han supuesto grandes avances en el diagnóstico y tratamiento de trastornos mentales de diverso tipo», explica la Universidad Internacional de Valencia en su guía «Las áreas de la psicología y la aplicación de las nuevas tecnologías»
Si te encuentras atrapado en una carretera sin una estación de carga a la vista, el vehículo te dará la cantidad de energía que utiliza para trasladarte directamente fuera de la carretera y con suerte a un area de descanso para no correr peligro.
Mi vehículo eléctrico llega al 0% de carga ¿qué hago?
En este caso, solo te queda llamar a la grua y que te acerque al punto más cercano de carga, y dependiendo de la fuerza de la estación de carga , te tocará pasar unas horas, hasta recargar la cantidad necesaria para llegar al destino, y vuelta a empezar con la ansiedad.
Uno de los desarrollos más prometedores en el sector de los vehículos eléctricos para calmar la ansiedad por la autonomía son las empresas emergentes que te brindan la carga. Llevan un generador que funciona a gasolina (vaya tela) y te cargan el vehículo A COSTA DE QUEMAR GASOLINA y por cierto, no muy rápido.
Esto nos lleva a afirmar, que el vehículo eléctrico (para quien se lo pueda permitir) es válido para trayectos cortos o de ciudad, en estos casos muy mal se nos tiene que dar, para ir con la batería recargada y nos quedemos tirados. (aunque tampoco lo podemos asegurar)
A día de hoy, según está concebido el vehículo eléctrico, con su alto coste, su poca autonomía, los pocos puntos de carga y el tiempo excesivo que necesitamos para volver a cargarlo, NO ES El PRESENTE NI EL FUTURO INMEDIATO.
Lo bueno de la range anxiety es que tiene cura, solo tienes que deshacerte de tu vehículo a pilas.
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