Dadas las cualidades de nuestro país en cuanto a recursos naturales, España podría convertirse en un país líder en producción y exportación de hidrógeno, que es una de las energías del futuro. Así, al menos, lo asegura Ana Isabel Martínez, ingeniera especializada en tecnologías del hidrógeno del Repsol Technology Lab: “España, por su situación estratégica, tiene una oportunidad puntera de pasar a ser importador de energía a ser exportador a otros mercados de Europa que no tienen nuestro potencial en energía solar. Y esto nos puede brindar el hidrógeno renovable”.
A esto hay que sumarle una gran capacidad de innovación, que nos hará punteros en este aspecto.
Durante estos últimos tiempos, el hidrógeno renovable se ha producido mediante el uso de biometano y aplicando la tecnología de la electrólisis (utiliza electricidad eólica o fotovoltaica para separar la molécula del agua en oxígeno e hidrógeno), pero esto ha cambiado. Un equipo de científicas españolas han encontrado un nuevo método para producir este tipo de energía de manera más eficiente, en lo que se ha convertido en un desarrollo de I+D totalmente español y liderado únicamente por mujeres, que trabajan con varios de los centros de investigación de hidrógeno más grandes de nuestro país.
Esta nueva tecnología, según explica María Dolores Hernández, una de las responsables del proyecto, se trata de la fotoelectrocatálisis: “El dispositivo recibe directamente radiación solar a través de un componente fotoactivo, generando las cargas eléctricas que permiten separar el agua en hidrógeno y oxígeno”, un proceso que abarata la producción.
Esta investigación lleva una década en activo y ya cuenta con una planta piloto en Repsol Technology Lab, el centro de innovación y tecnología que tiene la compañía ubicado en Móstoles (Madrid), que también quiere abrir una planta de demostración en su complejo de Puertollano. El objetivo con esto es lograr la producción industrial y la venta de hidrógeno renovable en 2030.
Este proyecto no es sólo de Repsol, también lo es de Enagás y estas dos empresas ya han invertido 8 millones de euros en él, además de crear una startup, Sunrgyze, con la que esperan atraer inversores para acelerar su desarrollo industrial y su comercialización. En cuanto a este proyecto, el CEO de Sunrgyze, Enrique Gómez de Priego declaró: “No suele ser habitual que grandes corporaciones hagan una especie de spin-off y lancen una startup a partir de una tecnología que han empezado a desarrollar”. Además, añadió: “es claramente una apuesta por desarrollar tecnologías que permitan avanzar en la descarbonización tanto a esas dos empresas como al resto del sector y, en última instancia, a toda la economía”.
El auge de esta energía es una gran oportunidad para nuestro país y para su economía, ya que contamos con recursos naturales e industriales suficientes para su desarrollo. Tomás Malango, director de hidrógeno de Repsol, asegura que: “España es uno de los países del mundo con mejores condiciones para desarrollar el hidrógeno renovable; a nivel europeo, somos el país mejor posicionado”, y que supone «la mayor oportunidad de industrialización y de relevancia energética a la que nuestro país se ha enfrentado nunca».
Y es que el hidrógeno renovable va a ser clave en los próximos años para la descarbonización de la economía mundial y se va a poder aplicar a diferentes sectores industriales, pero también a la propulsión de vehículos.
La UE también ayudará al avance de las energías renovables en nuestro país destinando un 37% de los 72.000 millones del Fondo ‘Next Generation EU’ que se dedicaran a la transición energética. Esta tecnología será sin duda una de las piezas importantes en el crecimiento de la economía española, de la industria, del conocimiento tecnológico y del empleo.
A un paso de un futuro más próspero y sostenible
Se trata de una meta ambiciosa, pero más que factible. La oportunidad de generar un hidrógeno renovable que sea competitivo es una realidad hoy, siempre y cuando se trabaje y se unan fuerzas para lograr un objetivo común tanto del sector público como privado. Según las cifras del último informe del Consejo del Hidrógeno, iniciativa que reúne a empresas internacionales líderes en el sector, sus costes de producción podrían caer hasta un 50% en los próximos diez años, lo que posibilitará que sea más competitivo a medida que la escala de producción, distribución y fabricación de equipos mejoren. La ciencia y la innovación en hidrógeno renovable avanzan fuertes en nuestro territorio. La fórmula española para fabricar una de las soluciones que descarbonizará la economía en los próximos años, puede lograr nuevos procesos industriales para un país donde abunda el sol y el viento, ingredientes imprescindibles para el sistema energético del futuro.
Fuente: Autopos